BANOFFEE CHEESECAKE

Oigo voces...
¿Cómo? No me entero bien... ¡más alto!
¿Qué decís?... Ahhh, que queréis saber qué es un Banoffee Cheesecake, jajaja. Pues eso está hecho.

Creo que para lo de Cheesecake sobran las explicaciones ¿no?, lo que viene siendo una tarta de queso de toda la vida, pero quizás algunos no sepáis en qué consiste exactamente eso de Banoffee.
Banoffee es un palabro-fusión entre banana y toffee, bueno quien dice toffee, dice dulce de leche también y, eso sí, ¡con extra de nata por favor!

Yo lo he unido todo, queso, plátano, nata... y aquí la tenéis, luciendo bien hermosa y realmente deliciosa.
Por ponerle "un pero" (influencia de Doña Pitu lo de las peguitas, quien, por cierto, se ha quedado sin catarla... ¡que venga más!, que no aparece por casa desde que se ha echado el amiguito americano y tanto practicar inglés tiene sus consecuencias, jajaja), me hubiese gustado la capa de tarta de queso un poco más fina, así que para la siguiente la haré en un molde más grande y arreglado (que la tendré que volver a hacer, porque lo que acabo de soltar a Doña Pitu no me lo perdona a menos que le ponga por delante el manjar :D).

BANOFFEE CHEESECAKE

BASE

• 150 gr galletas digestive
• 60 gr margarina

CHEESECAKE

• 2 huevos
• 600 gr queso crema (tipo philadelphia)
• 150 gr azúcar
• 100 gr nata 35% MG (se puede sustituir por un yogur griego)
• 1 plátano
• 2 cucharadas soperas harina

COBERTURA

• Dulce de leche (yo comprado)
• 2 plátanos
• 200 ml nata 35% MG
• 25 gr azúcar

DECORACIÓN

• Dulce de leche
• Plátano laminado
• Azúcar
• Soplete de cocina

Para la Base
Moler las galletas y mezclar con la margarina derretida.
Poner sobre la base de nuestro molde.
Yo he usado uno desmontable de 18 cm de diámetro, poniendo sobre la base un papel de horno y luego ajustando el aro, pero cualquier molde apto para horno puede servir (dejándolo en el mode, claro). Cuidado, al derretirse la margarina puede chorrear un poco, así que pon el molde sobre una bandejita y arreglado.

Para la CheeseCake
Ahora viene lo bueno... introducir todos los ingredientes en un bol y ¡batir con batidora!
Verter sobre la base de galletas y hornear a 170º C durante aproximadamente 50 minutos.
Tiene que estar cuajada, pero cuidado de que no se queme (lo digo siempre, cada horno es un mundo). Cuando ya esté, apagar el horno y dejar que se enfríe dentro.
Sacar del horno y dejar enfriar completamente.
Reservar en el frigorífico.

Para la Cobertura
Montar la nata bien fría con unas varillas eléctricas, cuando ya casi esté, añadir el azúcar y seguir batiendo... ¡cuidado no te pases y se corte la nata!
Cubrir nuestra tarta de queso ya fría con una capa de dulce de leche, puedes ser tan generoso como quieras, por eso no especifico la cantidad.
Sobre la capa de dulce de leche, poner los plátanos cortados a rodajitas finitas y cubriendo toda la superficie, amontona capas, no pasa nada, ponle los 2 plátanos enteros y verás qué rico.
Cubrir con la nata montada.

Para la Decoración

Puedes decorar con unas virutas de chocolate y listo o hacer lo que yo hice.

Cortar unas rodajas de plátano, cubrirlas con azúcar y quemar el azúcar con un soplete de cocina, eso sí, cuidado sobre qué superficie pones las rodajas de plátano para quemarlas, tiene que soportar el calor sin quemarse, no se, por ejemplo una fuente de cristal apta para horno.

Poner en el centro de la tarta, sobre la nata, unas cucharadas de dulce de leche y encima el plátano caramelizado.

Realmente deliciosa... como buena amante de las tartas de queso, amo esta tarta y, lo peor de todo (lo escuché el otro día en un vídeo compartido de los que pululan por Facebook),  realmente ella también me ama a mí... sí, sí ¡me ama! Se aferra a mi cinturón abdominal y no me quiere dejar, se queda conmigo porque ¡me ama!, jajaja.

Nos vemos pronto Churretos@s.

Besos.

Raquel