CARROT CAKE COCHOLATEADO

No se a vosotros, pero a mi me pasa que cuando me gusta mucho, mucho una tarta, soy un poco cansina... sí, que no paro de hacerla y comerla una y otra vez.
Además cualquier momento que surge para degustar un dulce, es el momento perfecto para volver a caer en sus redes y eso que ¡me gusta probar cosas diferentes!

Esto es lo que me pasa con la Tarta Especiada de Zanahoria, que he perdido la cuenta de las que lleva ya zampadas este "cuerpecito", jajaja.
Y ya que me gusta tanto, tanto y que me apasiona tanto el cocholate, he decidido dar una oportunidad a esta versión cocholateada y tengo que reconocer que, aunque el bizcocho es algo más denso, ¡su sabor es irresistible!

Y es que cuando llega la primavera, cualquier receta que lleve zanahorias y caiga en mis manos es susceptible de llevarse a cabo.
Todo tiene su explicación, no creáis que me vuelvo loca comprando zanahorias, es que "El Bigotes" (el hombre que puso la semillita para traerme a este mundo) hace ya muchos años que se dedica a su cultivo y es en esta época cuando empieza la recolecta del fruto y claro... ¡mi hogar se inunda de un intenso y bonito color naranja!
Así que se admiten sugerencias...

CARROT CAKE COCHOLATEADO

Adaptada de "Libro de Oro del Chocolate"

BIZCOCHO DE ZANAHORIA Y CHOCOLATE

• 150 gr Azúcar Moreno
• 3 Huevos Grandes
• 150 gr Aceite de Girasol
• 300 gr Harina
• 50 gr Cacao Puro Polvo
• 1/2 Cucharadita Bicarbonato Sódico
• 1 Cucharadita Levadura en Polvo
• 1 Cucharadita Canela Molida
• 1/2 Cucharadita Jengibre Molido
• 1/2 Cucharadita Sal Fina
• 300 gr Zanahoria Rallada
• 100 gr Nueces Picadas
• 150 gr Cocholate Postres Nestlé Troceado
• 3 Moldes de 15 cm de Diámetro

ALMÍBAR

• 50 gr Azúcar
• 100 gr Agua
• 1 Cucharadita Cacao Puro Polvo

CREMA DE QUESO COCHOLATEADA

• 200 ml Nata 35% M.G.
• 200 gr Queso Crema
• 50 gr Mantequilla Temperatura Ambiente
• 60 gr Azúcar
• 100 gr Cocholate Postres Nestlé

Para el Bizcocho
Mezclar el azúcar y los huevos con unas varillas eléctricas o una amasadora de cocina hasta que estén bien integrados.

Añadir el aceite y seguir mezclando.
Tamizar la harina, el bicarbonato, la levadura, la canela, el jengibre, el cacao en polvo y la sal e ir añadiendo poco a poco a la mezcla anterior. 

Seguir batiendo con las varillas justo hasta que todo esté integrado.
De forma manual, con la ayuda de una espátula, integrar la zanahoria, el cocholate troceado y las nueces a la preparación anterior.
Engrasar los 3 moldes de 15 cm y repartir la misma cantidad de masa en cada uno de ellos.
Se pueden adaptar las cantidades a los moldes de que dispongáis.
Esta misma receta hubiese quedado genial con 3 moldes de 18 cm de diámetro, hubiese quedado más bajita, pero es que es muy alta.
Hornear a 180º C durante aproximadamente 30-40 minutos, aunque como siempre digo, tenéis que estar pendientes porque cada horno es un mundo y lo que nunca falla es la prueba del palillo... ¡que salga limpio!

Sacamos del horno, esperamos 10-15 minutos y desmoldamos sobre una rejilla para dejarlo enfriar completamente.
Envolver en film transparente y reservar en la nevera hasta el montaje.

Para el Almíbar

Mezclar el azúcar con el agua y calentar hasta que se derrita el azúcar.

Añadir el cacao y mezclar hasta integrar.
Dejar enfriar y reservar en el frigorífico.

Para la Crema

Derretir el cocholate en el micro o al baño maría y reservar para que baje un poco la temperatura.

Montar la nata bien fría con varillas eléctricas y reservar en la nevera.
También con las varillas eléctricas, mezclar la mantequilla y azúcar, durante unos minutos, se tiene que apreciar el cambio de color de la mantequilla, se queda un poco más clarita.
Añadir el queso crema y el cocholate y seguir mezclando hasta que sea homogéneo.

Con la ayuda de una espátula, integramos la nata en esta mezcla de queso mediante movimientos envolventes para que no se baje.

Para el Montaje
Poner una de las capas de bizcocho sobre la base en la que vayamos a servir nuestra tarta, bañar en el almíbar y poner una capa de la crema.
Repite la operación bizcocho-almíbar-crema y al final pon la última capa de bizcocho previamente bañada en almíbar por la cara que pondrás hacia abajo.
Cubrir con la crema. 

En este caso la he dejado "desnuda", es decir, que no la he cubierto nada más que por arriba, quedando al descubierto los laterales y pudiéndose a preciar las capas de bizcocho-crema.
La decoración es al gusto. Yo he usado manga pastelera y virutas de cocholate.

Hasta hace poco, cuando veía estos Layer Cake descubiertos por los laterales, yo para hacerles referencia les llamaba Tartas de Decoración Rústica... lo que hace el desconocimiento, jajaja, menos mal que leo a muchas compis bloggeras que me van informando y hoy puedo deciros que se llaman Naked Cakes o Tartas Desnudas.
Me vais a perdonar, pero no recuerdo exactamente donde lo leí por primera vez, pero me hizo mucha gracia eso de que una tarta pudiese ir desnuda por la vida... pues ¡Que viva el Nudismo Tartil!

Nos vemos pronto Churretos@s.

Besos.

Raquel